Beatrice Mares gana la 2ª edición de los GreenWalk Awards
La diseñadora de 24 años Beatrice Mares gana la segunda edición de los GreenWalk Awards, el desfile de moda sostenible organizado por NHood España en el Centro Comercial el Ventanal de la Sierra. Diez kilos de cable trenzado y cintas de sujeción de palets componen el diseño. Conozcamos más a fondo a la ganadora.
¿Qué significa para ti haber ganado la segunda edición de los GreenWalk Awards?
Siento que haber ganado esta edición de moda sostenible es haber superado un reto muy grande para mi y estoy muy contenta de haberlo conseguido. La organización ha sido increíble y quiero agradecer a Nhood por habernos dejado vivir esta experiencia tan inolvidable a todos. El trabajo de mis compañeros también fue increíble y pienso que todos hemos conseguido plasmar nuestra personalidad y nuestras ideas en nuestros diseños.
El hecho de haber ganado me da mucha confianza en mí misma y todavía muchas más ganas de seguir aprendiendo y formándome para poder triunfar dentro del mundo de la moda. Para mi es un gran impulso dentro de mi carrera, ya que el hecho de que tantas personas hayan valorado mi trabajo me hace sentir muy agradecida y me da muchas más ganas de seguir explorando mi creatividad dentro del mundo de la moda.
¿Qué supone para una joven diseñadora haber sido galardonada con un curso en la escuela de diseño Saint Martins?
Para mi es un honor poder acudir a Saint Martins. Poco antes de conocer el evento de los Green Walk Awards, un profesor nos dijo: “Si algo de vosotros tuviera la más mínima oportunidad de hacer un curso en Saint Martins, que la aproveche al máximo.” Un par de días más tarde, vi el cartel anunciando los GWA en la puerta de mi colegio, me apunté y empecé a trabajar. Siendo estudiante de primero de Diseño de Moda en ese momento, no pensé que quedaría entre los finalistas, pero conforme fui perfeccionando mi idea empecé a sentirme más segura de mi misma y a confiar en que habría posibilidades de llegar a la fase final del concurso.
Ahora que he logrado mi objetivo y sé que voy a poder acudir a Saint Martins lo único que puedo hacer es seguir trabajando, explorando mi creatividad y confiando en mi intuición y en mi misma. Estoy segura de que voy a explotar el curso al máximo y voy a poder aprender mucho acudiendo a las clases.
Cuéntanos cómo concebiste tu diseño “Tech-Tie”.
Desde el principio quise llevar a cabo un diseño que no fuera algo simplemente atractivo visualmente, sino que tuviera un mensaje llamativo. Me gusta hacer recapacitar a los demás con la moda en forma de arte, por lo que busco un mensaje fuerte y crítico que me interese expresar.
Todo parte de una inspiración en el arte futurista. Esta corriente apareció por primera vez en 1909, buscando el escándalo y admirando la tecnología y el mundo moderno, tratando de romper con el arte pasado. Mi diseño es una crítica a todo ello, ya que la tecnología está avanzando muchísimo a un ritmo descontrolado.
Desde mi punto de vista, cada día somos más dependientes de nuestros dispositivos (Apple watch, IA, móviles…). Esto nos hace perder nuestra libertad, ya que la tecnología se está apoderando de nosotros, y siempre queremos tener los dispositivos más nuevos. Si a todo este consumismo le sumamos la obsolescencia programada de los dispositivos y los miles de kilómetros que se deben recorrer para conseguir su fabricación, como resultado obtendremos un mundo en el que acumulamos toneladas de basura electrónica mal almacenada, ya que debido a ello contaminamos y hacemos desaparecer ecosistemas.
Desde un principio quería emplear materiales no convencionales, es decir, cualquier cosa que no fuera tela (aunque fuera reciclada o reutilizada), por lo que empecé a hacer diseños y después pensé en los materiales.
Se me ocurrió ir a la chatarrería a ver si encontraba algo que me podía gustar, y vi que tenían muchísimos kilos de cables de muchos colores que me llamaron la atención. Pregunté cuánto costaba el kilo y me dijeron que los cables que ya no funcionan los comercializan en toneladas, no en kilos, ya que están destinados para fundir, pero logré llegar con ellos a un acuerdo.
Para la realización del diseño me centré sobre todo en el abrigo. Quería que este fuera la prenda estrella. Hice infinidad de pruebas, intentando hacer flecos con cables, tratando de trenzar los cables al abrigo… Finalmente opté por emplear un material antideslizante con pequeños agujeros e ir tejiendo los cables a través de ellos con un estampado de espiga como resultado. Además, podía combinar los colores de los cables tratando de dar un resultado más atractivo sin necesidad de pintarlos. Fueron muchísimas horas de tejer los cables, pero valió la pena.
Para el bolso aproveché unas placas base que también adquirí de la chatarrería. Estas placas base están unidas entre ellas con alambres para dar forma al bolso, y tiene asas hechas de cables que sobraron del abrigo.
Para el vestido decidí cambiar de materiales y emplear unas cintas de sujeción de palets de camión para hacer crítica a otro tema: El transporte de los productos electrónicos (ya que la mayoría de ellos son fabricados en otros continentes e importados a Europa posteriormente,).
¿Qué es para Beatrice Mares el upcycling?
Para mi el upcycling es emplear materiales para la fabricación de algo que nunca habríamos imaginado. Algo así como lo que hizo Marcel Duchamp en su obra “La Fuente”, empleando un urinario dado la vuelta, convirtiéndose en una obra referente del arte conceptual.
En el upcycling empleamos materiales para darles una funcionalidad completamente nueva. Desde mi punto de vista, cuanto mas alejado se encuentre este material de su entorno habitual, más impactante y atrevido será el resultado final.
Mediante el upcycling, además de reciclar (darle una nueva vida a un objeto), podemos incluso crear uno de mayor valor, ya sea moda, arte, o dentro de cualquier rama no artística. Además, muchas veces esto se puede llevar a cabo en casa con las herramientas adecuadas, pero sin necesidad de pasar por un proceso industrial.
¿Cuál es tu opinión sobre la industria textil?
La industria textil está sufriendo muchísimos cambios últimamente. Por una parte, hay un gran auge del fast fashion. Cada vez nos enfrentamos a más estímulos que nos hacen consumir moda rápida (influencers, ropa muy barata que se vende en masa, rebajas, microtendencias, redes sociales…). Hacer un pedido semanal de 20 prendas por 150 euros no es realista, ni sostenible. Tampoco tiene sentido. Con ello lo único que hacemos es seguir microtendencias y comprar por comprar, no reutilizar la ropa y contaminar el planeta. La industria de la moda es de las que más contamina, y es algo de lo que no se habla.
Como sociedad siempre hablamos de reducir las emisiones de CO2 de los coches y ahorrar agua a la hora de ducharnos, ¿pero y a la hora de comprar? No debemos dejar guiarnos por impulsos, ni influencers, ni rebajas. Muchas veces compramos por comprar y ni siquiera utilizamos esa ropa.
Por otra parte, pienso que también hay un auge de reutilización de la ropa. Hasta hace unos años era “cutre” comprar ropa de segunda mano. Si hacías eso los demás pensaban que era porque no tenías dinero. Ahora está de moda comprar en este tipo de tiendas y me parece genial. Me encanta ver a personas de mi edad llevan por ejemplo una prenda de los setenta por la calle. Es algo que nunca encontraríamos en las tiendas de fast fashion. Cuando voy a este tipo de tiendas me encanta ver prendas únicas y pensar en cómo combinarlas.
¿Cómo llegaste al mundo de la moda sostenible?
Pienso que diseñar con materiales reciclados siempre va a dar un resultado mucho más creativo y original que utilizando cualquier tela que podemos comprar en las tiendas. Al final se trabaja con lo que se tiene y es algo que nos puede sorprender incluso a nosotros mismos. Podemos pensar en hacernos una prenda o colección e ir a la tienda a por la tela que necesitamos, pero si por ejemplo en lugar de ello decidimos hacer con retales que tenemos en casa nos dará un resultado mucho más interesante.
Si en lugar de emplear materiales convencionales elegimos unos alternativos, el resultado será maravilloso. Podemos conseguir un resultado incluso más artístico, que es mi objetivo, no confeccionar ropa para el día a día.
Algunos de los looks que he hecho que más me han gustado están hecho con materiales que tenía en casa, ya que a veces no he tenido dinero o tiempo para poder conseguir lo que necesitaba y he tenido que ingeniármelas para tener un buen resultado, que muchas veces ha sido incluso mejor del que yo me esperaba.
Siempre está bien experimentar con todo, al final esta es la manera en la que exploramos nuestros límites y nuevos horizontes, que es lo que nos ayudará a encontrar nuestro estilo y con qué nos sentimos más cómodos a la hora de trabajar y diseñar.
¿Cuál sería la mejor actitud del consumidor de moda y de tecnología para cuidar el medio ambiente?
En cuanto a la moda, lo primordial es dejar de consumir fast fashion en la medida en la que lo hacemos. Estamos muy influenciados por diferentes estímulos continuamente, pero hay otras maneras de vestirse, además de manera mucho más original y divertida. Podemos hacer nuestra ropa, comprar en tiendas de segunda mano o yo incluso utilizo mucho la ropa de mis padres. Al final es una manera mucho más original de vestirse y puede ayudarte mucho a encontrar tu propio estilo.
En cuanto a la tecnología, diría lo mismo que con la ropa. No hace falta comprarse el móvil más nuevo si el que tienes todavía funciona. Siempre queremos tener lo que está de moda, lo más novedoso, pero no pensamos en las consecuencias que esto tiene. La industria tecnológica también se encuentra descontrolada, y hace un daño terrible a nuestro planeta. También podemos consumir tecnología de tiendas de segunda mano, o incluso compartirla con nuestra familia como con la ropa.
¿Qué planes de futuro tienes?
En primer lugar, quiero terminar mis estudios de Diseño de Moda, ya que todavía tengo que terminar el segundo año. Tengo muchas ganas de poder asistir al curso de Saint Martins cuanto antes, ya estoy informándome sobre las ramas que hay para elegir. Me interesa sobre todo lo relacionado con el diseño y cómo este está ligado al emprendimiento, ya que en un futuro quiero tener mi propia marca, y poder presentar diferentes colecciones de moda atrevidas y con un fuerte impacto, tanto en mensaje como visualmente.
El año pasado me gradué en la carrera de marketing, así que al terminar mis estudios de moda me gustaría poder trabajar en una editorial de moda para poder seguir aprendiendo sobre cómo funciona realmente este ámbito laboral y también aprender cosas que creo que sólo conoces trabajando, ya que nunca se enseñan en clase. Con toda esta experiencia quiero alcanzar mi objetivo final: Tener mi propia marca de moda y presentar colecciones de moda que no dejen al mundo indiferente. Quiero poder crear prendas sostenibles que llamen la atención y tengan un fuerte mensaje detrás.