Canotier, sombrero que nació italiano y tiene nombre francés

El canotier nació en 1880 y lo llevaban los gondoleros en Venecia, con diferentes colores de cinta un poco más largas. Así se diferenciaban de los oficiales de la marina, que eran cintas ajustadas a la copa del sombrero. También es un sombrero que identificaba a los alumnos de Oxford y Cambridge en las regatas.

Francia lo puso de moda, de ahí su nombre “Du Canotaje” en el Siglo XIX por su comodidad. Se trata de un sombrero muy fresco para el verano creado con paja sennit, que consiste en un trenzado de hebras secas humedecidas para facilitar la costura, en Signa, población de la provincia de Florencia (Italia). Podéis visitar su museo de la paja, una bellísima exposición repleta de maquinaria, sombreros e indumentaria realizada la mayoría por paja de centeno.

El canotier fue un sombrero que traspasó fronteras llegando a Estados Unidos por la inmigración de italianos y por la popularidad entre actores franceses como por ejemplo Maurice Chevalier.

Es un sombrero que se hizo imprescindible entre la clase social alta y acomodada, un ejemplo de ello es nuestro bisabuelo José Vilar Ruiz de Echevarria.

Gracias a Coco Chanel, se produjo un gran cambio en la vestimenta y en los complementos, un día que asistió a las carreras de caballos con su canotier, limpio, sencillo solo con un simple adorno de una cinta o badana de gross grain negra que rodeaba la copa de su canotier. Esto fue un antes y un después en el mundo del sombrero.

El canotier se cose en tres partes que son tapa, copa y ala. Se sigue creando de forma artesanal, por manos expertas, con su máquina de coser específica creada para este tipo de sombreros. El color de la cinta casi siempre es negra, pero todo depende para lo que se vaya a utilizar.

El canotier se reconoce fácilmente por su copa redonda y baja, y el ala cortita. Aunque en los últimos años, el ala ha amentado su tamaño hasta parecer una pamela.

En el taller de Montesinos Vilar lo creamos de forma tradicional, ya que es un sombrero que nos acompaña desde nuestro inicio.

Realizamos el sombrero canotier con una técnica de sombrerería tradicional que ya se utilizaba en el Siglo XIX. Con tarlatana y el tejido elegido por el cliente para que pueda llevar un total look del mismo tejido.

En Montesinos Vilar los realizamos a medida y siempre que el cliente nos lo solicite, con la badana interna bordada con su nombre. Pequeños detalles que marcan la diferencia, siendo piezas que forman parte del legado de su vestuario.